La forma en la que las mujeres canalizan el estrés que provoca el tratamiento para combatir la infertilidad afectaría sus posibilidades de quedar embarazadas, según sugirió un nuevo estudio de la Aristotle University Thessaloniki (Grecia), publicado por la revista «Fertility and Sterility».
El equipo de investigadores descubrió que las mujeres que solían compartir sus sentimientos eran menos propensas a quedar embarazadas que aquellas que encontraron otras formas de canalizar el estrés, como ciertos mecanismos para distraerse de sus emociones.
Los resultados son producto de las tasas de embarazo entre 342 mujeres tratadas con fertilización in vitro (FIV) en una clínica de fertilización de Grecia.
Alrededor de un 23% de las mujeres quedó embarazada, pero hubo una baja posibilidad de éxito en aquellas pacientes que manejaron el estrés de manera «emocionalmente expresiva».
Los resultados sugieren que los estilos femeninos de canalización del estrés son más importantes que el estrés en sí en el éxito de la FIV, indicaron los investigadores dirigidos por Dr. Efharis Panagopoulou.
Nuevos estudios deberían analizar si las mujeres bajo tratamiento de FIV obtienen algún beneficio de canalizar la distracción del estrés. Eso, sin embargo, no quiere decir que expresar los sentimientos sea negativo.
Muchos estudios, destacaron los autores, hallaron que expresar las emociones ayudaría a mantener la salud física y emocional. Pero esos trabajos no se ocuparon específicamente del embarazo después del tratamiento de FIV.
Por eso, para los investigadores se necesitan más estudios que permitan conocer en qué momento es mejor que las mujeres con trastornos de la fertilidad expresen sus emociones y cuándo la distracción es un mecanismo más óptimo para canalizarlas.