El endometrio es el tejido que recubre el interior del útero y permite la implantación del embrión. Sin embargo, cuando presenta alteraciones, puede reducir las probabilidades de lograr un embarazo.

Recientemente, una investigación innovadora demostró el potencial de las células madre provenientes del tejido adiposo para regenerar el endometrio en mujeres con el síndrome de Asherman. Este procedimiento se basa en tomar una muestra de tejido adiposo, purificar las células madre y aplicarlas en la cavidad uterina, permitiendo que el endometrio recupere su grosor ideal para la implantación embrionaria.

Este avance representa una gran oportunidad para aquellas mujeres que desean ser madres y enfrentan problemas endometriales.